Pintar partes de la carrocería de un coche que nadie, excepto Dios, va a apreciar es un modo de santificar el trabajo. Así lo procura hacer Gavin Dixon, un cooperador del Opus Dei irlandés.
Gavin Dixon, cooperador del Opus Dei irlandés.
Trabajo en un taller de coches: pinto muchos vehículos que han sido reparados después de un accidente y, en cada encargo, pido a Dios una intención particular.
A menudo trabajo con partes del coche que no se ven, pero, como ofrezco mi trabajo como una oración, me entusiasma prestar atención a los detalles en estas zonas.
Aprender cómo aplicar la fe católica de un modo práctico y enseñarlo a otros es algo que encuentro realmente atractivo y que me ayuda a que mi relación con Jesucristo sea más profunda.
opusdei.es
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